En JUCONI cuando hablamos de ambientes libres de violencia nos referimos a vivir en ambientes seguros. A lo largo de varios blogs iremos desarrollando el tema de seguridad, pilar fundamental para la creación de estos ambientes.
Las personas que han vivido violencia familiar frecuentemente se sienten amenazadas por su entorno. Básicamente han perdido la seguridad en ellas y en el mundo. En nuestra experiencia hemos encontrado que para realizar una intervención exitosa se necesita restaurar la seguridad en todas sus dimensiones.
Nuestra metodología está basada, en parte, en el Modelo Santuario de Sandra Bloom. Este modelo plantea cuatro tipos de seguridad: física, psicológica, social y moral, que deben trabajarse de manera simultánea.
Para que la seguridad prospere debemos tener un entendimiento claro de las consecuencias de vivir violencia o abuso. Pues se busca ofrecer servicios respetuosos que brinden un ambiente protector.
Algunas consecuencias de la exposición al trauma
- Se afecta la memoria y por lo tanto el aprendizaje.
- Se pierde la habilidad para identificar y nombrar sus emociones.
- Disminuye o desaparece el control de las emociones.
- Se afectan las habilidades sociales, por ejemplo: tener poca capacidad para relacionarse con otras personas.
- Se desarrolla una adicción al trauma. Las personas con estrés tóxico pueden volverse adictas a las endorfinas que libera su cuerpo para aliviar el dolor.
Para crear ambientes seguros debemos estar informados sobre la teoría del trauma, lo que cambiará nuestro entendimiento acerca de la violencia y cómo las personas viven estas consecuencias.
Si deseas revisar más a detalle el tema de trauma, te invitamos a nuestro curso on line sobre «Trauma psíquico: cuando la violencia deja huella» https://centrode-recursos-juconi.wisboo.com/courses/modulo-trauma-psiquico-cuando-la-violencia-familiar-deja-huella
Sigue informándote acerca del tema de seguridad en próximos blogs.